Curalotodo, remedio milagroso para cualquier enfermedad, panacea de todos los males. Don Quijote le dice a Sancho cuáles son sus ingredientes (aceite, vino, sal y romero) para curarse de una de las numerosas palizas que les dan. Se toman el mejunje cocido y bendecido con 80 padrenuestros, 80 avemarías, 80 salves y otros 80 credos. Después de vomitar, sudar y dormir Don Quijote se cura. En Sancho tiene un efecto vomitivo y laxante porque no es caballero andante, al decir de su amo.
"En los libros de caballería se decía que el bálsamo de Fierabrás, continuidad del que embalsamó a Cristo muerto, había sido robado por los musulmanes en Roma"